jueves, 1 de abril de 2010

Recuerdo crudo complejo y borroso















Caminaba por las procelosas calles mojadas
El destino jugaba al azar como todos los días
Como un vidrio polarizado
Solamente mire a la gente que vagaba
De aquí para allá en diversos lugares
Ocultando sus cabezas para no mojarse
Eran un grupo de cuatro o cinco niños
Unidos por un cordón umbilical invisible
Que los mantenía unidos en caso de alerta
Me detuve a mirarlos y ellos se detuvieron también
Por un momento estuvimos unidos por el mismo cordón
Me sentí igual de indefenso
Estando en medio de la lluvia y ellos a salvo
Note que la lluvia que caía bajo mis zapatos se coloreaba
Era un rojo muy escarlata
Salía de mi frente, alguno de esos niños me había arrojado una piedra
Mi frente sangraba
Se veían asustados y no pude hacer nada
Tuve la sensación de que me lo merecía por no ayudarlos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario